Consejos para pensar bien.

Aquí algunas pautas para facilitar que las cosas buenas ocurran en nuestras vidas:

1. Quienes somos: Comencemos por entender quienes somos, (valores, creencias, pasiones, fortalezas, metas y debilidades) Consideremos que nuestras fortalezas y debilidades nos ayudará a tomar decisiones más alineadas con lo que realmente queremos. (Preguntémosno lo qué deseamos lograr en la vida y cuáles son nuestros objetivos. Nuestras aspiraciones pueden proporcionar pistas sobre nuestra identidad y prioridades.)
2. Despertá tu potencial: Continúa aprendiendo y creciendo. Invertir en nuestro desarrollo personal a través de la educación, la formación y la exploración de nuevos intereses. Cuanto más nos desarrollemos, más preparados estaremos para aprovechar las oportunidades que se presenten. (podés leer el libro, descúbrete, pensar diferente.)
3. Establezcamos metas realistas: Definir metas claras y alcanzables para nosotros mismo. Establecer objetivos nos dará dirección y motivación para trabajar hacia las cosas buenas que deseamos. (una cosa que me propuse ejemplos de testimonios que nos hayan ocurrido).
4. Toma de decisiones: considera que se alineen con tus metas y valores antes de tomar una decisión. Cada decisión es una oportunidad de aprendizaje. Evaluemos cómo funcionaron nuestras elecciones anteriores y utilicemos esa retroalimentación para tomar decisiones más inteligentes en el futuro… (es probable que en algún momento de nuestra vida hayamos tomado decisiones basadas en como le fue a alguien más, o quizás basadas en cómo nos estábamos sintiendo en ese momento, a veces nos comprometemos a hacer cosas y después nos encontramos con que no nos da el tiempo o no tenemos los recursos para afrontarlo…) Por eso es sumamente importante no tomar decisiones a la ligera, ya sea por cuestiones de tiempo o por presión.
5. Acción: No nos quedemos solo en la planificación. La acción es fundamental para que las cosas buenas ocurran. (Una vez que comenzamos a avanzar, es más probable que continuemos avanzando. La acción alimenta la motivación. Nos brinda la oportunidad de aprender de la experiencia. Incluso si enfrentamos obstáculos o fracasos, estos son valiosas lecciones que nos permiten ajustar nuestros planes y estrategias.)
6. Persistencia: La vida puede presentar desafíos y en algunas ocasiones se puede poner difícil. La persistencia es clave. Aprendamos de los obstáculos y sigamos adelante con determinación. (que los obstáculos del momento no nos hagan tirar la toalla.).
7. Alegría de vivir: Cultivar una mentalidad positiva es esencial. Esto implica cambiar la forma en que vemos las situaciones y desafíos. Practicar el optimismo y ver oportunidades en lugar de obstáculos. (Cuando experimentamos alegría solemos tener menos estrés, ansiedad y depresión. Además, la alegría también puede fortalecer el sistema inmunológico y ayudar a prevenir enfermedades relacionadas con el estrés. Las personas alegres tienden a atraer a otros y a construir relaciones más saludables.).
8. Gratitud: Reconozcamos y apreciemos las cosas buenas que ya tenemos en nuestra vida, (y las no tan buenas también, porque seguramente que nos han enseñado algo o nos han dejado algo también; reconociendo que en momentos no tan gratos también nos han sido un puntapié para salir de lugares, soltar cosas, dejar entrar otras que nos han cambiado la vida para siempre). Esto nos ayudará a mantener una perspectiva positiva.

Recordemos que permitir que las cosas buenas sucedan puede llevar tiempo y esfuerzo, pero con perseverancia y una mentalidad positiva, podemos aumentar las posibilidades de que ocurran cosas positivas en nuestra vida.