¿Por que desperdiciar el tiempo?

El tiempo es uno de los bienes más valiosos que tenemos, es más valioso que el dinero, ya que vos podés hacer más dinero, pero no podés hacer más tiempo.

La palabra de Dios nos dice que recuperemos el tiempo, y eso significa: que no lo desperdicies, no vivas este día desenfocado, indisciplinado y desmotivado, pues tenemos la responsabilidad de usar nuestro tiempo sabiamente, ya que no siempre vamos a estar aquí, y este día es un regalo. ¿Estás viviéndolo al máximo? ¿Con propósito y pasión?  ¿Persiguiendo tus sueños? o ¿Estas distraído? ¿Indiferente? ¿Solamente haciendo lo que se presenta? ¿Estás en un trabajo que no te gusta? ¿Saliendo con personas que te desagradan? Esto no es recuperar el tiempo, eso es desperdiciar el tiempo y así como vos gastas el dinero, vos estas gastando tu vida, ya sea que la estés invirtiendo o la estés desperdiciando.

Y el primer paso es establecer metas; metas a corto plazo y metas a largo plazo. ¿Qué queres lograr esta semana? ¿Dónde queres estar en cinco años? ¿Tenes un plan? ¿Estás dando pasos para llegar allí? No pases otros tres años en un trabajo que no te gusta, haciendo algo por lo que no estás apasionado, la vida se pasa volando. Esta es tu oportunidad, uno no puede rehacerla, no podemos volver a vivir nuestros veinte o treinta. Una vez que este día termine, no lo podremos recuperar jamás.

Pablo dijo en el libro de Efesios: “Saquen el mayor provecho de cada oportunidad. No actúen sin pensar, más bien procuren entender lo que el Señor quiere que hagan” Si vas a alcanzar tu más alto potencial, vos tenes que ser una persona que viva “A propósito” Vos sabes a dónde vas, no sos vago, distraído, esperando a ver qué sucede, vos estas enfocado, sacando el mejor provecho de cada oportunidad. Déjamelo ponerlo en términos más prácticos: Estar en las redes sociales durante horas al día y enterándote de los últimos chismes no es redimir el tiempo. Jugar juegos de video durante horas al día cuando podrías estar estudiando no es recuperar el tiempo. Hablar durante horas por teléfono con un amigo que no va a ningún lado y que no tiene sueños no es recuperar el tiempo.  Dios te ha dado un presente y se llama “hoy”, ¿Qué estás haciendo con ello? Este es un llamado a la acción. Enfócate, organízate, establece tus metas, hace planes. Dios podría haber elegido a cualquiera para que estuviera aquí, pero te eligió a vos.

La Biblia habla acerca de vivir vidas bien invertidas, cuando vamos a la cama por la noche, deberíamos preguntarnos a nosotros mismos: “¿Viví un día bien invertido? ¿Di pasos hacia mis metas? ¿Fui una bendición para alguien más? ¿Invertí mi tiempo o desperdicié mi tiempo?

Conozco a demasiadas personas que son increíblemente talentosas y que tienen un gran potencial, pero que no son indisciplinadas cuando se trata de cómo invierten su tiempo. Tienen buenas intenciones, pero se distraen con facilidad y terminan saliéndose del curso, hay mil cosas buenas a las que les podés dar tu tiempo cada día. Tenes que ser disciplinado para mantenerte enfocado en lo que es mejor para vos; sino vos terminaras persiguiendo la última tendencia, tratando de seguirle el ritmo a sus amigos, distraído, enredado en las cosas que no son parte de tu destino.

No desperdicies el tiempo con las personas que no tienen afinidad con vos, si no les mostras la puerta amablemente, pueden evitar que cumplas tu destino. Algunas veces sabemos que una persona no es buena para nosotros y sabemos que nos está haciendo ir más lento, pero pensamos que, si la dejamos ir, vamos a estar solitarios. Si, quizás estés solitario durante una temporada, pero vos nunca renuncies a algo para Dios sin que Él te dé algo a cambio. Dios no solamente te dará nuevos amigos, Él te dará mejores amigos. Personas que te inspiren, que te celebren y que te impulsen hacia adelante.

Esto probablemente quiera decir que tenes que cambiar con quién tratas muchas veces todos los días. Esas personas que siempre están encontrando fallas, que es criticona y que habla mal de todos; vos no necesitas ese veneno en tu vida. Eso no es recuperar el tiempo, quizá tengas que dejar de pasar tiempo con ese vecino que siempre está deprimido, derrotado y que siempre tiene una canción triste. Si vos te quedas allí, vas a terminar derrotado. Es mejor hacer el cambio y estar solitario por una temporada que quedar envenenado de por vida.

Mira…, cuando llegamos al final de nuestros días, Dios nos va a preguntar: “¿Qué hiciste con el tiempo que te confié? ¿Desarrollaste tus dones y talentos? ¿Cumpliste con tu misión? ¿Cómo invertiste tu vida?”. No va a ser una buena excusa decir: “Dios, me distraje, pero mi amigo fue quien me desvió”. “Dios, viví amargado, pero fue porque alguien me hizo algo malo”. “Dios, fui pesimista, pero fue porque mi empresa me dejo ir”.

Yo te pido que dejes de dar excusas y comiences a no desperdiciar el tiempo. No siempre vamos a estar aquí. La Biblia dice: “La vida de ustedes es como la neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma”. 

Toma la decisión de que vos vas a ser una persona que viva a propósito. Establece tus metas y disciplínate para seguir con ellas. No desperdicies más días. Recorta esas relaciones que no te están añadiendo a tu vida. Y no te vayas a la cama con algún tipo de derrota, amargura o negatividad todavía en tu mente. Este día es un regalo. Asegúrate de estar invirtiendo tu tiempo y de no estar desperdiciándolo. Si vos haces esto, las semillas de grandeza dentro tuyo van a arraigarse y a comenzar a florecer. Vos vas a ver el favor de Dios en nuevas maneras.